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La LUNA, después del Sol, es el cuerpo más importante en la Carta Natal; las características del signo que ocupa forman parte integrante de la personalidad. Tiene una influencia directa en los hábitos y reacciones en un ambiente dado y en el comportamiento instintivo. Define las tendencias psíquicas de la persona y su comportamiento inconsciente. Su revolución alrededor de la Tierra dura 28 días.
Los nativos que tengan a la Luna en Aries: tendrán una mente muy independiente, anhelará pavimentar el camino de su vida por sí solo, ya sea cierto o equivocado y estará extremadamente propenso a resentirse de cualquier interferencia de los demás. Será una persona ambiciosa y posiblemente agresiva, pero le faltará previsión, de modo que estará expuesta a encontrarse con numerosos contratiempos. Esta posición de la Luna, da coraje y una gran intrepidez y, así, serán difícilmente vencidas. Si fracasan en una dirección, inmediatamente buscarán otra aventura y finalmente su persistencia les llevará a puestos sobresalientes, a menos que la Luna esté seriamente afligida. Serán personas que busquen siempre la superación, aunque parten de un sentimiento de inseguridad. Su reacción a los desafíos mundanos será personal y habitualmente de acuerdo con las emociones o malos humores de ese instante, las reacciones cambiarán constantemente y, en consecuencia los demás pueden sentir que con esta persona no se puede contar. En la Carta Natal de un hombre, esta posición de la Luna hace que busquen mujeres dominantes y en la Carta Natal de una mujer, esta posición hace que sean mujeres muy independientes y posiblemente augure problemas con el padre.
Los nativos que tengan a la Luna: (exaltación de la Luna) al estar en su signo de exaltación su efecto es muy poderoso, sobre todo si la Luna está libre de aflicciones y bien aspectada. Esta posición de la Luna hará que estas personas sean gentiles, sociables, hospitalarias, determinadas y muy confiadas en sí mismas. Igualmente da perseverancia, bondad y previsión, por lo tanto estos nativos atraerán hacia ellos todas las cosas buenas de la vida: salud, riquezas, amigos, familia y propiedades, teniendo además la capacidad de disfrutar de todas estas cosas. Serán amigos del placer y la buena mesa. Buscarán seguridad emocional, sobre todo en la familia, a veces la búsqueda de seguridad les puede limitar demasiado. Sus actitudes y costumbres pueden apoyarse en costumbres culturales tradicionales. Buscarán coherencia y consistencia en todas las cosas estando pragmáticamente orientadas y, así, sus sentimientos estarán condicionados para apreciar a las cosas y personas más bien según valores más realistas tangibles que abstractos. Serán personas afectuosas y serán demostrativos en sus afectos. Serán más sensuales que materialistas, pudiendo obtener mucha satisfacción emocional del mundo físico que le rodea, aunque en ocasiones puede absorberse totalmente en su propia comodidad. Le serán extremadamente difíciles los cambios, especialmente los repentinos. Tendrán gran habilidad para los masajes. En la Carta de un hombre, “indica” una pareja con dinero si la Luna no tiene malos aspectos.
Los nativos que tengan a la Luna en Géminis: tendrán una inteligencia amplia y una gran atracción por la literatura y la ciencia. Se verán atraídos por ocupaciones literarias, especialmente en el campo de la prensa. Igualmente sentirán atracción por los viajes y deseos de ocupar puestos en las que se visiten a muchas personas. Es una posición que se da en los escritores porque estos nativos conectan más con las emociones escribiendo o hablando ya que son algo dispersos y les cuesta conectar con las emociones porque tienden a analizarlas y racionalizarlas y, además les dan muchas vueltas. Los hermanos son muy importantes para ellos, aunque a menudo se sienten hijos únicos o les gustaría serlo. Los ajustes personales a la vida son condicionados por el deseo de que se le pueda conocer en muchos campos diversos, y que los demás le admiren por su destreza. El peligro radica en la superficialidad y la falta de coherencia en el pensamiento. Los personales juicios de pensamiento, a menudo se confunden con lógica y raciocinio. Todo les parece interesante, pero ese interés rara vez es sostenido. No les gusta que les inmovilicen, para ellos la estabilidad es un anatema, y buscará variedad a expensas de la seguridad. La diferencia entre la rutina y una tumba es sólo cuestión de grado. Mienten frecuentemente.
Los nativos que tengan a la Luna en Cáncer: (domicilio de la Luna) tendrán una disposición bondadosa, sociable y simpática, pero con cierta aversión a los esfuerzos tanto físicos como morales. Les gusta nadar a favor de la corriente y únicamente manifiestan alguna actividad bajo el latigazo de la necesidad. A menudo son personas muy sensitivas a las condiciones psíquicas, especialmente si la Luna está aspectada por Neptuno o Urano, determinando la naturaleza del aspecto si la influencia es favorable o desfavorable. El gusto por el hogar y por las comodidades será grande. Si la Luna estuviera afligida tendrá propensión a trastornos digestivos. Serán personas muy apegadas al pasado, les costará mucho romper con él. Suelen ser muy buenos padres, aunque algo proteccionistas. Existe en estos nativos cierta tendencia a tener miedo al futuro, les costará mucho tomar decisiones y, sentirán algo de temor infantil a sentirse desprotegidos. La protección familiar les pesará mucho, dándole mucha importancia a la madre. Sienten gran necesidad de seguridad emocional. La Luna en signos de agua (Cáncer, Escorpio y Piscis) tienden a quedarse con la parte negativa del otro. Limitará el ámbito de sus actividades a alguna esfera definida, y dentro de esos límites, habrá una expresión plena y rica de las emociones. Situaciones y personas las juzgarán por idiosincrasia según la propia experiencia personal. Las experiencias infantiles, y particularmente la relación con la madre, podrán establecer pautas habituales para toda una vida. Gran memoria para las heridas emocionales, que le conducirán a la cavilación y al mal humor.
Los nativos que tengan a la Luna en Leo: serán encantadores, persuasivos, fuertes y confiados en sí mismos, agresivos y muy capacitados para la organización. Serán honrados en los negocios, claros y magnánimos en sus relaciones con los demás y muy populares. Sentirán una gran necesidad de reconocimiento y de cariño y un gran miedo al rechazo. Exhibirán a menudo un fuerte magnetismo y un orgullo excesivo que muchos interpretarán como arrogancia. Si hay algo que valora, es su reputación y harán lo que sea necesario para que le admiren. Su vanidad es herida fácilmente y no aceptará la crítica con comodidad, ni tolerará a las personas que pongan obstáculos en su camino. Superficialmente tal vez parezca más dúctil que otras personas, pero no lo es. Es compulsivamente generosa, no le gusta economizar, le gusta ir en primera clase. Esta posición de la Luna indica una madre avasalladora.
Los nativos que tengan a la Luna en Virgo: bien aspectada aumentará las facultades mentales, dando una gran retentiva a la mente, un amor por el estudio de materias científicas u ocultas y una ambición grande por sobresalir. La química será la ciencia favorita de estos nativos y pueden sobresalir como dietéticos. Serán más bien reservados, de maneras tranquilas y pacíficas, tendrán más éxito como empleados que como empresarios. Seguirán estrictas pautas de conductas establecidas por razones lógicas o morales. A menudo, pueden ser de pensamiento y conducta rígidos y orgullosos. Tendrán temor o desconfianza innatos a sus emociones y tal vez sean renuentes a permitir que éstas se expresen libremente. Tendrán un extraordinariamente desarrollado sentido del deber y serán muy concienzudos. Sobre todo buscarán el orden en su vida, prefiriendo hacer las cosas según el orden establecido. Cuando los nativos con la Luna en el signo de Virgo son llevados a los extremos, puede tener por resultado una conducta crítica y solitaria.
Los nativos que tengan a la Luna en Libra: es una posición afortunada para adquirir amigos y popularidad pública, será una persona bondadosa, simpática y agradable, optimista y amiga de los placeres sociables. Dará gran fuerza razonadora y la capacidad de formar un juicio exacto. Sentirán un fuerte deseo de aceptación social y una sensibilidad extrema hacia las opiniones que los demás tengan de estos nativos. Los valores e ideales culturales y las normas de urbanidad por los que juzga a los demás serán el mismo criterio por el que está seguro que le juzguen a él. Será clasista y hasta oportunista en la elección de sus amigos. Querrá que todo sea refinado, aborrecerá la crudeza y tendrá dificultad en enfrentar las realidades más duras de la vida.
Los nativos que tengan a la Luna en Escorpio: (caída de la Luna) Serán personas animadas independientes y enérgicas, no tolerarán las intromisiones de otros en sus planes o verse sometidos a la imposición de las ideas de los demás. Abruptas en sus maneras y ásperas al hablar, de temperamento impulsivo y no se dejarán dominar por las amenazas. Su voluntad será fuerte y obstinada, con la determinación constante de llegar al fin en todas las cosas que emprendan. Gran atracción hacia las ciencias ocultas. Si la Luna está afligida, puede conducir a un exceso en la satisfacción de los sentidos, disgustos con mujeres y dificultades en los partos. Poseen un fuerte control sobre sus emociones y aunque buscan experiencias emocionales intensas, en el ámbito de las relaciones interpersonales, pueden volverse muy celosos y posesivos respecto a un ser amado. Raras veces exhibirá la hondura de sus sentimientos, sobre todo si fueron heridos por esa relación. Serán más materialistas que sensuales. No solo mantendrán por largo tiempo todo el mal que le han hecho, sino que tal vez pasen años urdiendo la venganza. Es la posición de hijos no deseados.
Los nativos que tengan a la Luna en Sagitario: Tendrán una personalidad activa y alerta y anhelos de caminar o bien otro medio de ejercicio físico. Serán amigos de viajar por países desconocidos, amantes de los animales, especialmente caballos y perros, con inclinación al estudio de las leyes, religiones, filosofía o la ciencia del ocultismo. Serán personas muy optimistas, bien humoradas, joviales y compañeros ideales, a menos que la Luna esté afligida. Los ajustes personales a la vida serán condicionados por un fuerte deseo de libertad, tanto física como mental. Medran con un sentimiento de los espacios muy abiertos, y cuando se sientan cercados, escapará. Por lo general serán francos y amigables con las personas, pero no siempre serán capaz de accionar ante sus particulares diferencias y necesidades. No le gustará tener que ocuparse de las minucias implícitas en sus planes de largo alcance. Hablan bien y pueden ser buenos maestros. Necesitan sentir que en la vida hay una finalidad. Hay una tendencia a jugar, si no con sus bienes materiales, entonces con su salud, su carrera o su posición social. Porque no pueden mentir, a menudo son crédulos.
Los nativos que tengan a la Luna en Capricornio: (exilio de la Luna) si está bien aspectada proporcionará gran ayuda de las demás personas que están más elevadas en la escala social que ellos, de modo que cualquier éxito que tengan puede que venga por medio de los demás. Son personas muy tímidas para abrirse paso por sí mismos, suelen tener una mente dada a la melancolía que la hace excesivamente sensitiva a los desaires, ya sean reales o imaginados. Si está afligida dará una propensión a las calumnias tanto si son merecidas o no. Esta posición produce un efecto perjudicial sobre la digestión. Suelen tener un insano miedo a verse en la miseria y, por tanto, se hacen avariciosas negándose a sí mismas todas las comodidades que les brinda el dinero. Tienen muy poco sentimiento por sí mismas y ninguno por los demás. Procurarán constantemente justificarse ante los ojos de la sociedad, empeñándose en ganar la aprobación de ésta y demostrar que son dignos de que les amen. La causa radical de esta inseguridad estriba en sus sentimientos infantiles de que no lo amen o necesiten. Sobre todo, quieren sentirse necesarios y harán todo lo que pueda para que los demás crean que lo que hace es necesario para ellos. Las mujeres les gusta vestirse de negro, posición propia de monjas. La Luna en este signo no dará belleza.
Los nativos que tengan a la Luna en Acuario: serán personas que no dependen de la facultad de la razón, poseerán una intuición excesivamente desarrollada. Serán sociables, bondadosas y corteses con el resultado de que atraerán muchos amigos durante su vida. Si la Luna está afligida, señalará a una persona con una mente muy excéntrica. Tendrán dependencia emocional a los valores e ideales de algún grupo u organización. Esencialmente prefieren trabajar solos. Observan la vida más que participan en ella, y por ello su enfoque personal será impersonal. La rebelión por la rebelión misma es una virtud para estos nativos.
Los nativos que tengan a la Luna en Piscis: Dará una mente receptiva y una imaginación fértil, con disposición hacia la indolencia y hacia la propia compasión; al mismo tiempo serán vacilantes y esta posición produce el desfallecimiento del corazón. Hace que estos nativos sean más amigos de los sueños que de la actividad, y por lo tanto, el dolor, las molestias y las cosas dejadas por hacer marcan el paso de su vida. Si la Luna está afligida, los asuntos del amor pueden dar a la persona serios disgustos. Si Piscis está en la casa 12 y la Luna allí al nacimiento, dará propensión a los padres hacia la bebida, teniendo como consecuencia que en algunos casos abandonen a sus hijos, quienes entonces pueden verse en la precisión de ser recluidos en instituciones de caridad hasta que alcanzan la mayoría de edad Condicionará, a menudo, su vida en términos de sus esperanzas personales de un futuro mejor, de alguna condición ideal o de algún estado trascendente. Serán extremadamente sensibles al humor colectivo y muy susceptible a éste. Tal vez sean hipersensible en muchos niveles, desde el psíquico al alérgico. Aunque siempre están dispuestos a sacrificarse por los demás, con frecuencia se resienten hondamente (y no necesariamente de forma silenciosa) por su propia condición, en cuyo caso se convierte en el mártir suspirante y lleno de aflicción. Esencialmente, no le gusta la realidad concreta, y alguna forma de escapismo, como drogas o alcohol, puede llegar a ser un peligro. Tendencia a habitar en un mundo de sueños y esto puede obstaculizar su aptitud para actuar eficazmente frente a la realidad concreta, como lo puede su tendencia a empatizar más que a simpatizar con los problemas de los demás. Los nativos con esta posición suelen tener dudas sobre sus orígenes.
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